La creencia en las teorías de la conspiración, hasta hace poco más de una década exclusiva de la extrema derecha y de los sectores más fanáticos del fundamentalismo religioso estadounidense, se ha ido extendiendo como una mancha de aceite entre otros grupos sociales y por otros territorios, en paralelo con el uso de Internet. Es indudable el atractivo que conllevan las explicaciones simples en un mundo cada vez más complejo, pero no deja de ser preocupante esta proliferación de charlatanes, farsantes y chalados disfrazados de revolucionarios, una situación que nos retrotrae a los momentos iniciales del nazismo –con el antisemitismo y el esoterismo como nexos de unión entre aquel pasado y nuestro presente.
Como ocurre con las drogas, son demasiadas las webs dedicadas a propagar toda suerte de patrañas y muy pocas las que intentan contrarrestarlas. Una de ellas es Conspiranoia Times, que recurre al humor para ridiculizar a los conspiranoicos sin dejar de hacerse preguntas sobre algunas cuestiones (Bilderberg, el 11-S) que merecen mejores respuestas que las ofrecidas por la franja lunática. Por su parte, Mike Ibáñez es –entre otras muchas cosas- uno de los cerebros en la sombra de Spectra, un engendro diabólico que organiza simposios anuales sobre conspiranoia y mantiene un interesantísimo canal en Youtube. Si te preocupan más Goldman Sachs, Rupert Murdoch o KBR que los Rotschild, las armas secretas de Tesla o los lagartos extraterrestres, no dejes de visitar estos sitios.
http://conspiranoia-times.blogspot.com/
http://www.youtube.com/user/spectratv
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