Hasta que de Repronto...

Frente a una televisión que, con la excepción de algunas series anglosajonas de gran nivel, es cada vez más subnormal, amarillista, desagradable y chillona (lo de "la caja tonta" ha quedado obsoleto con el correr de los años), Internet se ha convertido en un refugio imprescindible para numerosas propuestas audiovisuales que compensan la falta de medios con inteligencia, sentido del humor y creatividad a raudales. Tras una primera temporada que nos dejó a muchos con síndrome de abstinencia, vuelve Reflexiones de Repronto, una mirada cargada de ironía, lucidez y sentido común hacia la cultura audiovisual que ofrece respuestas a grandes enigmas de la historia moderna como, "Si Pluto es un perro, ¿qué cojones es Goofy?" (El comesandías) o "¿Por qué los héroes españoles no visten traje regional?" (El cabrón del campo). Raúl Minchinela, el anchorman de este espacio, está mucho más cómodo ante la cámara que en sus primeros tanteos y se muestra actualmente como un dignísimo sucesor de monstruos televisivos del pasado tales que Alfredo Amestoy o Jiménez del Oso, y la nueva temporada de la serie sigue una línea ascendente respecto a la anterior, que ya había dejado el listón muy alto.

En el aparente abismo entre las culturas highbrow y lowbrow ha surgido un formidable puente llamado Reflexiones de Repronto. No dejen de cruzarlo, amigos.

Reflexiones de Repronto

Artículo de Jordi Costa sobre el Reprontismo